Tensa reunión entre ministros, parlamentarios y alcaldes por Termoeléctrica Los Robles
agosto 14th, 2010 by Fernando
[Fuente: El Cauquenino.com]
Por Fernando Salinas Manfredini
Con la frase «Los Ministros no han entendido nada» el diputado Pablo Lorenzini se retiró indignado y anticipadamente de la reunión que se desarrollaba, el jueves 12 del presente en las dependencias del Ministerio del Medio Ambiente, en relación a la instalación de la Termoeléctrica Los Robles.
En la cita participaban la Ministra del Medio Ambiente, María Ignacia Benítez, el Ministro de Energía, Ricardo Raineri, los senadores Hernán Larraín, Andrés Zaldívar y Ximena Rincón, el diputado Ignacio Urrutia, los Alcaldes de Constitución, Chanco y Pelluhue, Hugo Tillería, Viviana Díaz y Carlos Zúñiga, más representantes de la comunidad maulina.
La reunión, gestada por el senador Larraín, tenía por objeto dar a conocer a los nuevos ministros la preocupación de toda la comunidad maulina por la eventual instalación de la Termoeléctrica Los Robles, por parte de la empresa AES Gener S.A., cuyo Estudio de Impacto Ambiental ya está aprobado y varios de los recursos de protección puestos por la ciudadanía no han tenido eco en la Corte Suprema. En relación a esto último las organizaciones sociales que han interpuesto los recursos de protección han manifestado sistemáticamente que hay una asimetría total entre las capacidades de la empresa y los pocos recursos con que cuenta la ciudadanía para demostrar, en plazos legales muy pequeños, que la aprobación de este proyecto ha sido técnicamente irresponsable.
El senador Larraín hizo una exposición muy completa de todas las etapas que ha tenido el proceso de aprobación de la termoeléctrica e hizo notar que el recién pasado terremoto y posterior maremoto es un nuevo evento, extraordinario, que cambia totalmente la situación en varios sentidos. Por un lado, el Maule costero ha sido devastado, la gente recién se está comenzando a reponer y la reconstrucción durará años; como nunca antes se requiere potenciar la agricultura, la pesca y el turismo, y la instalación de esta termoeléctrica sería el tiro de gracia para sumir a esta región en la pobreza y la desesperanza. Por otro lado, el senador Larraín se preguntó ¿qué hubiera pasado si la termoeléctrica hubiera estado funcionando para el día del maremoto? Probablemente el desastre ecológico habría sido incalculable: barcos carboneros hundidos con toda su carga, junto a la dispersión producida por las canchas de carbón y cenizas de la termoeléctrica.
El senador Zaldívar insistió en la importancia de cumplir los tratados internacionales para la emisión de CO2 y dado que se está implementando una nueva normativa para las centrales termoeléctricas a carbón, más ajustada a los estándares internacionales, no tiene sentido implementar una planta que se ha aprobado con la normativa antigua.
El diputado Urrutia insistió en que se tomara en cuenta el informe de la Comisión Investigadora de la Cámara de Diputados, en el cual se concluye un sinnúmero de irregularidades en el proceso de aprobación del proyecto, y que lamentablemente no ha sido considerado por las instancias judiciales y contraloras del Estado de Chile.
El diputado Lorenzini dijo expresamente que «esa termoeléctrica no se va a instalar… no lo vamos a permitir» y también hizo alusión a todas las irregularidades que se evidenciaron en este proceso.
Los tres alcaldes de la zona coincidieron con lo planteado por los parlamentarios y con mucha energía plantearon que ellos seguirán luchando para evitar el desastre que se produciría si se instalara la planta.
Posteriormente, Rodrigo de la O, dirigente del sector turístico del Maule Sur, hizo notar a los ministros el impacto que tendría este proyecto en el turismo, el cual necesita de mucho apoyo para superar los estragos del maremoto. En lo personal, me remití a los estudios técnicos que indicaban la inconveniencia de instalar la termoeléctrica en esa zona, y como la empresa AES Gener S.A. había utilizado un modelo de predicción climática inadecuado, además prohibido en Estados Unidos, para minimizar el impacto de la dispersión de contaminantes en la zona. Hice alusión al hecho de que nuestro movimiento Acción Ciudadana Pro-defensa de la Costa del Maule, desde su formación en 2007 indicó en su sitio web www.losrobles-no.cl la total despreocupación, en el Estudio de Impacto Ambiental, de los estragos que podría producir un tsunami en el área de instalación de la planta… cosa que sí sucedió lamentablemente el 27 de febrero pasado.
Llegado el momento de la intervención de los ministros, que todos esperaban, la situación se tornó candente cuando la Ministra del Medio Ambiente dio a entender que éste era un proceso que ya había terminado, incluso en la Corte Suprema, y que nada se podía hacer. El Ministro de Energía sólo se remitió a hablar de las necesidades energéticas de Chile para sustentar el crecimiento de los próximos años. Los senadores insistieron en que la situación del terremoto-maremoto, la cual instalaba un nuevo contexto, ameritaba un re-estudio de este proyecto, toda vez que el rechazo de la comunidad es transversal y unánime.
Fue después de que la Ministra Benítez insistiera en que su cartera nada podía hacer al respecto, que el diputado Lorenzini manifestó a los presentes que la reunión no tenía sentido porque «los ministros no han entendido nada». Luego anunció su retiro de la sala sin antes decir que la comunidad no va a aceptar de ninguna manera la instalación de la planta y que al momento de colocarse la primera piedra se iba a producir una gran explosión social y los ministros tendrán que hacerse responsables. En ese momento la situación, hasta el momento tensa pero calma, se transformó radicalmente. Los senadores hicieron ver a los ministros que si bien, ellos preferían que esto tuviera una solución más acorde con el diálogo y la diplomacia, coincidían con el diputado Lorenzini en que la situación podía escalar a niveles incontrolables. Los alcaldes solidarizaron explícitamente con el diputado Lorenzini y declararon su intención de aunar esfuerzos para la «lucha que viene». Manifestaron que sus comunas han sido devastadas por la naturaleza, y que muchas personas lo han perdido todo, y no van a permitir que se les siga devastando, esta vez desde una empresa transnacional con la venia del Estado de Chile.
Fue muy impresionante para quienes estuvimos presentes como una inicial situación de calma controlada se fue transformando en tensión máxima, donde se manifestaron tres posiciones. Por un lado, los ministros sin intención de solucionar el problema, por otro lado los alcaldes, los diputados y la ciudadanía en pie de guerra y, en medio de ambos, los senadores tratando de mediar y crear conciencia en los nuevos ministros que esta situación no está resuelta con un dictamen de la Corte Suprema, la solución debe venir desde las altas esferas del gobierno, buscando el mecanismo que permita detener la instalación de la termoeléctrica con el consiguiente estallido social.
Fecha de publicación: agosto14, 2010 a las 9:16 pm